Noción de competitividad. Es frecuente que los voceros oficialistas y los economistas utilicen en sus análisis conceptos técnicos que no son comprendidos cabalmente por la población, ni aún por la población con formación profesional. Peor todavía, usualmente estos conceptos esconden realidades e implicaciones que pasan desapercibidos y que es imperativo desentrañar. Es el caso del concepto “competitividad”. Leemos y escuchamos que la competitividad va y que la competitividad viene, pero la gente se queda en ele-olo chico zapote.
¿Qué es la competitividad y qué realidades oculta? En cristiano, es la capacidad que tiene un productor, una empresa o un país para vender de manera sostenida sus productos a menor precio, o con mayor calidad, o mejores condiciones, que sus competidores. ¿De dónde proviene esa capacidad? Puede ser que sus costos de producir son menores, o su equipamiento tecnológico es mayor, o su eficiencia es más elevada, o bien, porque el sistema económico en que se inscribe favorece el despliegue de tales capacidades (carreteras y puertos, calidad de la educación o la eficiencia gubernamental, por ejemplo).
Un ejemplo para comprender mejor.- Supongamos una pequeña o mediana fábrica de muebles. Esta empresa puede exportar su producción a otros países o competir a nivel interno con los muebles importados, si sus precios de venta son menores; o si sus diseños, la calidad de la madera y de los acabados son atractivos; o si la agilidad y cumplimiento en los tiempos de entrega es adecuada. Estos son aspectos que en alguna medida la empresa puede controlar.
Pero hay factores que la empresa no controla: el costo de la energía y del transporte, el costo de la madera y demás materias primas, las condiciones del crédito, para citar algunos. Estos factores forman parte del circuito económico al que pertenece la empresa. Además, hay otros condicionantes más amplios, tales como: la eficiencia en los trámites aduaneros para exportar; los incentivos o desincentivos fiscales; la seguridad en el traslado de la mercancía; la estabilidad de la moneda; las regulaciones forestales, etc. A estos últimos se les denomina marco institucional, que incluye las políticas públicas. La política, entonces, es relevante, cuando hablamos de competitividad. El conjunto de factores enunciados influyen con mayor o menor intensidad en la competitividad de la empresa.
Siguiendo con nuestro ejemplo, vamos a concentrarnos en tres factores: electricidad, transporte y crédito, los cuales previsiblemente formen parte sustancial de los costos de producción de nuestra figurada empresa de muebles, aunque con seguridad son factores claves en las empresas reales en tanto que forman parte de los denominados “precios líderes” de la economía nacional.
Vamos a las realidades.- Veamos las cosas más de cerca: ¿Quién establece las tarifas de energía eléctrica, cómo y en función de qué intereses? Lo establece la empresa Tesaca (TSK), a precios de monopolio, con base en un memorándum suscrito con el gobierno que se mantiene oculto. ¿Resultado? Las empresas nicaragüenses pagan la tarifa eléctrica más alta de Centroamérica (25.08 cts de dólar, KW hora en Nicaragua, frente a 17.16, Honduras; 20.48, Guatemala; 20.27, El Salvador; en el caso de la tarifa industrial).
¿Quién establece los precios del combustible? El grupo económico de Ortega, que detenta el monopolio de las importaciones de petróleo, su almacenamiento y parte sustancial de la red de distribución. ¿Resultado? Los operadores petroleros locales tienen la más alta tasa de ganancia de Centroamérica, mientras las empresas nicaragüenses pagan el combustible más caro de la región.
¿Quién establece los costos del crédito, esto es, las tasas de interés? El oligopolio bancario que controla el sistema financiero nacional. Los bancos “nacionales” registran los más altos márgenes de intermediación y las tasas más altas de rentabilidad de Centroamérica. ¿Resultado? Las empresas nicaragüenses para financiar sus operaciones deben pagar el crédito más caro de la región.
En otras palabras, las empresas nicaragüenses deben competir a nivel local y en los mercados externos en condiciones desventajosas, pues una buena parte de sus costos son resultado de “precios líderes” que imponen los monopolios que medran al amparo del poder. Es decir, esas desventajas NO SON resultado del libre mercado, sino exactamente al contrario: obedecen a la ausencia de libre mercado, dado que monopolios y oligopolios son aberraciones de una economía de mercado.
Pero, además de restar competitividad a las empresas y al sistema económico en su conjunto ¿qué otros impactos tienen estos mecanismos económicos monopólicos?
Si la rentabilidad de una empresa se expresa en la magnitud de la diferencia entre sus ingresos y sus costos de producción, y, como ya vimos, los costos de producción son más elevados en Nicaragua a causa de la presencia de monopolios en eslabones claves, significa que parte del margen de rentabilidad de nuestras empresas es sustraído por esos agentes económicos ventajistas. Si esto es así, las disponibilidades para reinvertir, incorporar nuevos equipos y tecnologías, modernizar los procesos, se encuentra trabada por una formidable restricción: las estructuras de poder económico.
Así, mientras los caudales de acumulación en las cúpulas crecen (reportes internacionales muestran que en Nicaragua el número de multimillonarios ha aumentado), la mayoría de las empresas debe enfrentar circunstancias adversas para sobrevivir. Posiblemente nos encontramos aquí con una de las claves que explica la tendencia declinante de las inversiones privadas y las precarias importaciones de maquinaria y equipo que registran las cifras oficiales.
Por supuesto, hay otros costos en nuestro ejemplo, como la madera y la mano de obra Aquí precisamente se esconde otro gato. Sigamos.
Dado que no es posible alterar los costos del combustible, electricidad, o tasas de interés ¿de dónde sale la tela? ¿de dónde surge la competitividad externa? Del lado más flaco: de la mano de obra. Lo que se conoce como abaratamiento de la mano de obra.
Y este abaratamiento no es necesariamente una decisión voluntaria de las empresas pequeñas y medianas. Es resultado de políticas económicas deliberadas que se diseñan y aplican desde el poder. La tercerización, la política de contención salarial, el deslizamiento de la moneda, la informalización de la economía, la cooptación sindical, en fin, la denominada desregulación laboral, son algunos de los mecanismos utilizados para abaratar la mano de obra. Por consiguiente, la principal fuente de competitividad de nuestra economía es el precio de la mano de obra. Ahí está la explicación del persistente deterioro de los salarios reales.
Algunas conclusiones.- Este mercado deformado –que la propaganda oficial nos hace pasar como libre mercado- constituye la principal causa del atraso del país y de la desigualdad. ¿Cómo puede competir esta empresa con las otras fábricas de madera de Centroamérica si parte de su capital “lo chupan” los monopolios incrustados en el sistema económico? ¿Cómo pueden mejorar las condiciones de vida de los trabajadores si la política económica estratégica se basa en el abaratamiento de la mano de obra?
Con estos antecedentes puede comprenderse por qué las élites económicas y políticas no están realmente interesadas en invertir para mejorar la calidad de la educación. ¿Qué interés pueden tener en mejorar la educación si la operación del modelo actual les asegura las más altas tasas de rentabilidad de Centroamérica? Lo que necesitan es disciplina social, poder político y control económico. Y esas son las columnas de la alianza entre la oligarquía tradicional y la lumpen-oligarquía emergente.
La solución supone una decisión política estratégica: establecer mecanismos que desalienten la imposición monopólica de los precios del combustible, la energía y tasas de interés, promoviendo una economía de mercado que propicie la competencia, favorezca la competitividad de las pequeñas y medianas empresas y mejore la distribución del ingreso.
Melanio Enrique
Interesante articulo Don Enrique según el cual en Nicaragua las únicas empresas rentables son los bancos y las generadoras de energía eléctrica. El resto de empresas tiene que obtener su rentabilidad explotando la mano de obra barata de nuestros trabajadores. Sin embargo no es esa la realidad que reflejan los dirigentes del COSEP, Centrales SIndicales y Gobierno. Según ellos las empresas nicaraguenses gozan de un bienestar económico sin precedentes, me refiero a las empresas constructoras, urbanizadoras, materiales de construcciones, comercio en general, etc.
Los nicaraguenses vemos con mucha frecuencia a los dirigentes sindicales defendiendo las políticas económicas del gobierno y del COSEP porque, como ellos mismo lo indican, son políticas «consensuadas». Entonces como nicaraguense estoy confundido pero la verdad es que mi pequeña empresa y mi economía familiar cada día enfrentan mayores dificultades.
Leonel Ojeda
Con este artículo queda demostrado que la rancia y hedionda oligarquía tradicional es incapaz de oponerse a la destrucción institucional practicada por el dictador y sus secuaces, porque esta asquerosa forma de ejercer el poder, les garantiza plenamente mantener el status quo, sin ser molestados en sus negocios. Igual demuestra por qué el mal llamado gran capital criollo es INCAPAZ de competir fuera de la economía nacional y por eso mantienen ese maridaje perverso con el poder con tal de mantener sus nichos de mercado. También demuestra que la rancia y hedionda oligarquía tradicional y ahora la lumpen oligarquía es CAPAZ de mantener ese status quo, si y sólo sí están enchufados al poder, sino es así, la extinción sería el final de su existencia, por esa razón es que no apuestan a la educación, a la cultura ni a la innovación tecnológica.-
Esilda Montiel
Excelente artículo Enrique, muy didáctico! Más claro no canta un gallo del por qué no salimos de la pobreza.
jesaenz
Muchas gracias, Esilda.
donald bonilla
La solución es cambiar el sistema de gobierno que tenemos, por uno que beneficie a las mayorías de las empresas en Nicaragua.
rigoberto
Clarisimo Lic Enrique S…Vos sabes perfectamente de la problematica de nuestra Nicaragua;;;;siempre he sido un admirador fiel de tus conseptos;;;;lo que te pido aqui publicamente,,es que te cuides mucho;;;vos sabes como actuan estos malandros de la mentira;;;;;no les importa;;danar y destruir a los hombres y mujeres de bien en nuestro pais;;;la lucha por la verdad es dificil pero al final siempre la verdad triunfa,,,,cuidate hermano;;;que dios te proteja en tu lucha;;;;;que es la lucha de todos;;;;;;;
jesaenz
Muchas gracias, Rigo, por tus consejos y tu buena voluntad. Saludos,