Hoy es Día Internacional del Migrante: Mi regalo es un retrato y un libro de cuentas

Hoy 18 de diciembre es “Día Internacional de los migrantes”, en el calendario de Naciones Unidas. Más de un millón de nicaragüenses residen en el exterior. Y por allí debemos empezar, por dejar de utilizar la palabra migrantes y referirnos a los “nicaragüenses residentes en el exterior”.

Es elemental que expresemos nuestro reconocimiento a estos compatriotas que han buscado más allá de nuestras fronteras las oportunidades que nuestro país no les ofrece. Ellos y ellas, desde donde están, cumplen un papel decisivo aunque no siempre es justamente valorado.

¿Quiénes son esos nicaragüenses? Intentaré dibujar un retrato, utilizando los números publicados por una organización especializada, la Organización Internacional Migraciones:

• Tienen el rostro de mujer. A la inversa de lo que ocurría hace algunos años, la tendencia actual es al aumento de la proporción de mujeres que se marchan. Los datos más recientes revelan que en la actualidad ya las mujeres son mayoría: 53.5% en Estados Unidos, 53% en España, 60% en Panamá.
¿Cuántas son madres que se ven obligadas a dejar a sus hijos para buscar como alimentarlos y educarlos? ¿Cuántas son madres solteras o víctimas de violencia doméstica que igualmente deben buscar la sobrevivencia y la seguridad en otros rumbos? ¿Cuántas dificultades, discriminación y peligros deben enfrentar estas mujeres?

• En plena juventud. De acuerdo a los registros oficiales, de cada cuatro nicaragüenses residentes en el exterior, tres se encuentran entre 15 y 34 años. En la flor de la vida. Pero no solo se trata de capacidad productiva sino también reproductiva. El reporte de OIM consigna un dato interesante: las mujeres nicaragüenses residentes en Costa Rica tienen una tasa de fecundidad mayor que las mujeres residentes en Nicaragua. Esto es, tienen más hijos.

• Gente humilde. El nivel de escolaridad es un indicador de la condición social de quienes emigran. Aunque el nivel promedio de instrucción y años de estudios aprobados es mayor al promedio nacional, en general son bajos y varían en función del país de destino. Los más altos niveles educativos se registran en Estados Unidos y Panamá, pues bachilleres y universitarios son mayoría. En Costa Rica los niveles prevalecientes son de primaria o menos.

• Trabajadores en labores duras pero con bajos ingresos. De forma general, la emigración es una estrategia de sobrevivencia. Nadie quiere salir de su país, menos aún alejarse de su familia sin una razón poderosa. El principal incentivo es la oportunidad de empleo y de mayores ingresos. En todos los países de destino, los salarios por ocupación son mayores que en Nicaragua. Sin embargo, las principales ocupaciones se ubican en los rangos de menor remuneración: servicios domésticos en España. Construcción, domésticas y servicios en Costa Rica. En Estados Unidos se marca una diferencia: los nicas se emplean primordialmente en ventas, oficinas y servicios.

• ¿De dónde vienen? En su mayoría son managuas, leoneses, chinandeganos y estelianos. Esos departamentos son el origen de las principales corrientes migratorios. En el caso de Estados Unidos, más del 40% provienen de Managua.

• ¿Cuántos son? El estudio mencionado estima que son aproximadamente 800 mil. Teniendo en cuenta el tiempo transcurrido desde que se recogieron esos datos y la magnitud de los flujos anuales, cifrados en 40 mil al año, a esta fecha seguramente superan la cantidad de un millón. Esto representa cerca del 15% de la población del país.

• El papel de las abuelas. Hay un punto que usualmente se pasa por alto y es una gran injusticia. Me refiero al papel social y económico que cumplen las abuelas. Ellas se quedan al cuido de los hijos, de la casa y de los fondos. Para que se den una idea, en el caso de los nicas residentes en Costa Rica, el 53% ha dejado sus hijos con las abuelas.
Pasemos ahora al libro de cuentas. Con los niveles de desempleo y subempleo que abaten a la mayoría de los nicaragüenses y con los bajos salarios, muchas familias no podrían enviar a los muchachos a las escuelas, ni tener una vivienda o atender sus problemas de salud, y aún comer, sin la contribución del trabajo de sus parientes en el exterior. Pero no solo las familias se benefician de ese sudor. El país entero es el que se sostiene con su contribución.

Anotemos solamente algunos datos:
1. De acuerdo a los informes del Banco Central este año se registrará un nuevo crecimiento en el monto de las remesas familiares: se acercará a 1.200 millones de dólares. Ese ingreso de divisas es decisivo para mantener la estabilidad macroeconómica que tanto pregonan los voceros gubernamentales: la estabilidad de la tasa de cambio, el control de la inflación y del déficit fiscal no podrían sostenerse sin los flujos de remesas.

Para que tengan una idea más aproximada les presento las siguientes comparaciones: las remesas representan casi la mitad de las exportaciones; casi el 60% de la totalidad del gasto público en educación, salud, policía, ejército, carreteras, administración de justicia. Además se aproxima al total de las inversiones extranjeras que recibe el país.

2. Pero también son el principal factor en la lucha contra pobreza. Hay algo que jamás han mencionado los voceros gubernamentales ni sus comensales: la pobreza se ha mantenido prácticamente estancada en los últimos años. ¿Y saben por qué no ha crecido? Gracias a las remesas. Porque si no fuera por las remesas la pobreza habría crecido al menos en 4% por encima de los niveles actuales. Son los pobres, con su trabajo en el exterior, los que evitan que los niveles de pobreza se eleven. No son ni los programas ni las políticas gubernamentales. Esta aseveración pueden comprobarla si revisan los estudios de FIDEG sobre la pobreza.

3. Pero no solo de pan vive el hombre. Con todo y la importancia de las remesas no podemos olvidar que en la migración hay una dimensión cultural, histórica y social que no siempre es visible. Basta recordar que Rubén Darío y Salomón de la Selva fueron migrantes. Tampoco podemos olvidar que Augusto C. Sandino también fue un trabajador migrante. Los tres hicieron contribuciones decisivas al afianzamiento de la nacionalidad nicaragüense.

Vaya pues mi saludo emocionado y agradecido a todos los nicaragüenses residentes en el exterior. A mi hijo, nietos, hermana, primos y primas, amigos de primaria, de secundaria, de universidad, amigos de barrio, va especialmente para ustedes.